Ensamblajes versus varietales
Otros nombres para ensamblajes: blends o corte
Otros nombres para varietales: monovarietales o puros
En la historia del vino a nivel mundial existen dos grandes categorías. El VIEJO MUNDO, o los productores más tradicionales de vino, de los países de europeos, que siempre han trabajado los ENSAMBLAJES. Viñedos plantados hace siglos, y desde los inicios, mezclados, con distintas variedades. A veces ni sabían que tenían. Hoy si, la mayoría, cuenta con la tecnología en términos de identificación. Hoy uno va a una bodega en Europa, y está todo mapeado. Exacto hasta con elevaciones. Siguen trabajando los ensamblajes, con la diferencia que ahora saben con exactitud los porcentajes de cada variedad.
Al dedicarse a los ensamblajes, el viejo mundo le dio prioridad al origen, en St. Emilion, no hablamos de variedades, sabemos que el vino puede tener Merlot y Cabernet Franc. Cuando nos mencionan el famoso Chateauneuf du Pape, pueden ser hasta trece variedades diferentes. Y así, cuando hablamos de vinos Chianti en Toscana, hablamos de uva Sangiovese. Si vamos a Alemania, en el Palatinado o Pfalz, será la variedad Riesling. Y terminaré con Rioja en España, esos tintos generosos son Tempranillo y/o Garnacha. Podría llenar páginas de ejemplos pero la idea es explicar, que el viejo mundo, trabajó el ensamblaje y priorizó el origen, su tierra, su historia.
El ensamblaje tiene otra maravilla, podemos compensar algunas características, que no nos aporta una variedad, con la otra y así equilibramos. Lo cual se agradece. El cuerpo que le falta a una , lo buscamos en la otra, y jugamos con los porcentajes. Y así, el cocineo.
En el otro lado, están los VARIETALES. El NUEVO MUNDO productor de vinos, es decir, USA, Canadá, Argentina, Chile, Sudáfrica, Uruguay, Nueva Zelanda y Australia, decidió diferenciarse y entregarle la gran responsabilidad, del vino, a una sola variedad. Por lo que salieron al mundo vendiendo sus Mono varietales , porque vaya que todos los países del nuevo mundo tienen, un gran potencial para muchas variedades. No solo las emblemáticas.
El varietal, también tiene su maravilla, la posibilidad, de tener una “cita” a veces a ciegas con una sola variedad, y conocerla con más tranquilidad. Es un lujo. Cosa que en un ensamblaje no podrás, muchas veces algunas se esconden, y si no eres un buen degustador, se te pierden.
Si lo pensamos bien, era algo que, como decía mi Abuela "caía de cajón". Porque las regiones de origen vitivinícola europea son lugares, con una historia inmensa. En cambio, el nuevo mundo, tenían más potencial en sus climas y fruta maravillosa, fue una buena jugada. Por lo que a fines del 1800 y comienzos del 1900, cruzan océanos y montañas, y salen al mundo con fuerza a vender sus variedades. Hoy, podemos decir que ambos estilos conviven muy bien en el planeta. Es cosa de ver las cartas de todos los restaurantes del mundo, estanterías, compartidas entre varietales y ensamblajes. GENIAL!
ENSAMBLAJES o VARIETALES. Con el primero, conocemos más en profundidad el viñedo de donde proviene el vino, y con el segundo, logramos sentir como se comporta una variedad en específico dentro de ese viñedo. Interesante análisis, ambos mágicos!
Yo personalmente los voy turnando, y los acompaño de lo más importante, buenas amistades, música, tranquilidad y algo para comer😀 . Les dejo unas ideas más abajo
Buen fin de semana,
Niki