UD HA DEVUELTO ALGUNA VEZ UN VINO EN UN RESTAURANTE?

 

Cuando devolvemos una prenda en una tienda porque lo hacemos?...Lo principal es porque la talla es incorrecta, quizás el día que me la compré estaba como un globo y al llegar a casa era dos tallas menos.  Otra razón puede ser una falla de fábrica, algún detallito que no vi en tienda, pero en la calma del hogar frente a mi espejo la vi.  Otra razón, puede ser un tercero, llegué feliz con mi prenda y cuando me la pongo, está esa otra persona que te dice, “ y eso?”, “que feo”, “sácatelo”; por lo tanto, te viene la inseguridad.  Puede que por todas estas razones, usted con un fin muy claro y justificable, parte con su boleta a la tienda y cambia su producto.

Pero y que pasa con el vino?

Pensemos en lo siguiente, en la carta de vinos, no hay nada que usted conozca mucho, y lo que pidió, no le gustó. Lo va a cambiar porque no le gustó?....NOOOO….No es motivo suficiente.  Es un buen vino, pero simplemente a Ud. no le gustó.

 

Que paso?  Veamos, diferentes escenarios.

Pidió uno o dos “sours” de entradita.  Esto bloqueó todas sus papilas gustativas y el vino seguramente lo va a sentir ácido.  Es un caso muy común.  Entonces piénselo antes de emitir un juicio, si ya se puso un pisco sour.  O haga lo siguiente, si está en compañía pídale la opinión a quien está con usted.

Otro caso, llegó con ganas de tomarse una copa, como digo yo, “con tiritones” y directo lo tomó y lo tragó….¿qué pasó? Seguro lo sintió amargo.  ¿Porque? Porque el vino pasó de largo sin detenerse en ninguna papila gustativa, solo se detuvo en las papilas de los sabores amargos, que son las últimas antes de tragar, y obvio, sintió el vino amargo.  Entonces, no llegue y trague el vino. Disfrute con calma, déjelo unos segundos en su boca, para que se conecte con las papilas de los sabores, dulces, salados, ácidos y al final amargo.

Otro reclamo común, ¡este vino está muy alcohólico! Si, puede ser, a veces los vinos, al descorchar suelen estar con cierto desequilibrio entre nariz y boca, entonces pida a quien lo está atendiendo, que se lo decanten en la mesa.  Y al oxigenarse, el vino va a agarrar vuelo.  No reclame de inmediato una vez descorchado, dele unos minutos.  El vino es producto vivo, ávido de oxígeno, a veces necesita el proceso de decantación, que no es solo para vinos antiguos, hay vinos nuevos, que también lo requieren.  Me lo puede decantar porfavor, eso está perfecto, dele con confianza.

Tampoco reclame que el vino tiene un defecto, cuando ya se ha consumido, más de la mitad de la botella….eso …bueno eso es patudez!

Si el vino tiene sedimentos, también, pida con toda tranquilidad que se lo decanten.  Los sedimentos no son un defecto, muchas veces las viñas prefieren no filtrar porque es un proceso muy violento para el líquido.  A veces lo declaran en las contra etiquetas, “No filtrado” o “Unfiltered”.  Esto quiere decir que el vino se mantuvo más tiempo con mini pedacitos de poli fenoles o materias colorantes, lo cual es bueno.

Otra queja, ¡El vino está caliente!.  Toda la razón, nada más desagradable que tomar un vino tinto o blanco con exceso de temperatura.  Pida una cubitera, con hielo, y con esto le baja la temperatura.

Que defectos puede tener un vino. Acorchado, solo 1% de los vinos con corcho puede tenerlo, es un olor muy característico a cartón mojado.  Otro defecto, es la reducción, el vino tiene olor a huevo podrido, ese es un problema.   Un defecto clásico, es el espumante sin burbujas, ahí ni se arrugue, de vuelta, inaceptable!. Y en boca, lo más clásico es que el vino tenga una acidez excesiva, se le dice normalmente el vino está picado.

No es lo ideal, que el vino tenga que reclamarlo, no es una experiencia  agradable, muchas veces, quien está atendiéndolo, debe llamar a su superior.  Y llega esta persona, con más jinetas y más conocimientos, por lo general de muy buenos modales, y de manera muy intimidante, mirándolo a Ud. a los ojos,  le dice -“Me comentaron que no le gustó el vino, algún motivo en especial, para poder proceder con el cambio”.  En ese momento, sea calmo, tenga claro su reclamo, seguramente todo va a salir bien.  No odie a la persona, de servicio, ellos cumplen con un protocolo.  Tampoco, haga la del patrón de fundo, "quiero hablar con el dueño, soy amigo", eso está pasado de moda.  Porque le van a decir que no está.  Eso también es parte del protocolo muchas veces.  Fluya.

 

Ir a un lugar, debe ser una linda experiencia, y la gente que está a cargo del servicio, está acostumbradísima a estas cosas.  No tenga vergüenza, ni miedo en pedir, decantar, cubitera.  

Ir a un lindo lugar, que lo atiendan, en buena compañía, escuchar música agradable, vestirse bonito, reírse y escuchar  el sonido del entorno, encontrarse con gente conocida...como no va a ser lindo. No deje que nada le afecte.  El equipo de servicio tiene todas las herramientas para solucionar sus problemas, y son inmensamente felices cuando lo logran.  Ellos no solo quiere que Ud.  se vaya feliz, sino que además ojalá vuelva.

Buen fin de semana.

Niki